martes, 20 de septiembre de 2011

Recorrido arquitectónico


En un plano Nolli se puede identificar fácilmente las zonas construidas y las zonas vacías. Podemos observar que en el micro centro, la zona que rodea a Plaza de Mayo, las manzanas están casi en su totalidad llenas, contando con un mínimo espacio vacío generalmente en el centro, lo que indica que los edificios están pegados a las medianeras sin dejar ningún borde libre, mientras que a medida que se acerca a Puerto Madero, y en Puerto madero en sí, el vacío gana importancia y se podría decir que es mas que lo lleno, dando así una imagen mas abierta, edificios de perímetro libre y mas aire en las manzanas.

  
 En la zona céntrica, el carácter edilicio adopta las características del movimiento clásico. Las construcciones poseen recintos ornamentados y ambientes de doble altura.


 
Al mismo tiempo, la trama urbana no proporciona vacíos, por lo que se conforma una cuadricula.
Por otro lado, al acercarse a la Av. Eduardo Madero, la trama urbana deja de ser simétrica, para convertirse en manzanas chicas e irregulares.
 



Así es como se produce una apertura a los espacios verdes y al río, generando visuales sin obstáculos, como también un cambio en la materialidad de los edificios, lo cual los hace contemporáneos. 

  

Equipamiento en Puerto Madero
Al convertirse la ciudad en un sector de transito peatonal, el equipamiento comienza a tomar protagonismo, no solo buscando crear miradores o lugares de esparcimiento, sino también generar con su estética una situación particular. Aunque se encuentra mayormente planificado, no lo es el caso de las grúas, las cuales siendo un equipamiento público obligado, no afectan la visual del paseo.